El cine en Roma

Una de las imágenes más conocidas cinematográficamente de Roma es la de Anita Ekberg dentro de la Fontana de Trevi en la "Dolce Vita" (1959) de Fellini. Sin dudas uno de los autores que más veces han utilizado la ciudad eterna como marco para sus historias: "Roma" (1971) o "Ginger y fred" (1985). En "Roma" se conduce al espectador a través de una ciudad en plena transformación: la excavación de los túneles del metro con la aparición constante de ruinas y frescos (escena de las catacumbas). En la segunda refleja una ciudad caótica y surrealista.
Pero para empezar a hablar de Roma y el cine habría que hacerlo desde los años del neorrealismo, cuando Vittorio de Sica en su "Ladrón de bicicletas" (1948) describe una ciudad dividida en tres círculos donde se mueven sus habitantes según sus condicionantes sociales, más tarde repite su experiencia romana con "Stazione Termini" (1953) donde trabajaban Montgomery Clift y Jennifer Jones, y Umberto D. (1952). Pero remontándose aún más atraás se encontrará a Rossellini con su "Roma, ciudad abierta" (1945) y que un año después dirigirá el episodio de "Paisa" para describir la llegada de una de las tropas aliadas a la capital italiana.
Resumiendo, se puede decir que todos los directores han utilizado de una manera u otra Roma para y en sus películas.

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